domingo, 13 de abril de 2008

Avión supersónico Lapcat A2: Bruselas-Sydney en 4 horas y media







La retirada del Concorde fue un duro golpe para la ingeniería aeronáutica francesa, y un paso atrás para la aviación comercial en general. El vuelo supersónico o incluso hipersónico es el siguiente escalón en los viajes de largo alcance, en los que encontramos pasajeros con un perfil muy determinado y cuyo tiempo es oro, lo cual les hace valorar el hecho de que un vuelo de 18 horas se reduzca a unas 4 horas aproximadamente. Ya no se trata de hacer los aviones más grandes y cómodos (que también), sino de hacerlos mucho más rápidos.

Y es eso precisamente lo que la empresa británica Reaction Engines quiere hacer con este prototipo que alcanzará una velocidad de crucero de hasta 5 Mach. Las grandes mejoras que lo diferencian de su predecesor, el Concorde, son su gran alcance (hasta 20.000 km), su motor, y un precio de billete muy similar al de clase business en las rutas que ofrecen actualmente las compañías aéreas que operan con aviones convencionales.

La propulsión de este prototipo consiste en un motor tipo cohete, de hidrógeno y oxígeno. Los vehículos espaciales que han utilizado este tipo de motor hasta ahora (lanzaderas de la nasa), necesitaban llevar consigo el oxígeno, pero para un vuelo dentro de la atmósfera el A2 se ahorra el peso que supone el oxígeno líquido y la máquina realiza lo que han denominado “airbreathing“.

Aún no se ha hablado de plazos, pero seguro que será recibido con los brazos abiertos por todos aquellos que han de realizar vuelos internacionales al otro lado del mundo y se pasan horas y horas en el avión.

1 comentario:

Anónimo dijo...

esta buenísimo pero es super grande por eso es interesante